Las intensas lluvias que azotaron la provincia de Jujuy en los últimos días generaron un drástico descenso de temperaturas y fuertes tormentas que afectaron gravemente diversas zonas. El temporal ocasionó inundaciones, cortes de rutas y el arrastre de animales por la crecida de los ríos, generando una situación de emergencia en varias localidades.
Uno de los principales problemas derivados de estas precipitaciones extremas fue la contaminación del agua potable. La empresa estatal Agua Potable de Jujuy informó que los índices de turbiedad en las fuentes de captación alcanzaron niveles inusuales, lo que afecta la producción y distribución del servicio en San Salvador de Jujuy. Se registraron valores de hasta 100.000 NTU en el Río Grande y 40.000 NTU en Guerrero, lo que impide la potabilización normal del recurso.
Las autoridades indicaron que el fenómeno fue provocado por más de 206 mm de lluvia en una sola jornada, con un acumulado adicional de 50 mm durante la madrugada siguiente. Esto arrastró sedimentos y materia orgánica hacia las plantas de captación, dificultando el proceso de purificación del agua. Equipos especializados trabajan intensamente para restablecer el servicio, priorizando el suministro en la zona céntrica, donde se encuentran hospitales y clínicas.
Mientras se normaliza la situación, las autoridades pidieron a la población un uso responsable del agua potable para evitar el desabastecimiento. También se recomienda a los ciudadanos mantenerse informados a través de los canales oficiales y tomar precauciones ante posibles nuevas precipitaciones en la región.