Durante la temporada de verano, Santa Ana, conocido como «el pueblo de las nubes», se presenta como un destino ideal para los viajeros que buscan sumergirse en paisajes majestuosos y actividades culturales únicas. Ubicado en el departamento de Valle Grande, en la provincia de Jujuy, este pintoresco pueblo ofrece una experiencia auténtica en la selva montañosa de las Yungas.
Entre las actividades destacadas para realizar en Santa Ana durante el verano se encuentran las caminatas por el Qhapaq Ñan, un antiguo camino inca declarado Patrimonio Mundial de la Humanidad. Los visitantes pueden disfrutar de senderos que atraviesan paisajes de transición entre la Quebrada y la exuberante vegetación de las Yungas, ideales para el trekking y la observación de flora y fauna. Además, la comunidad local ofrece experiencias de turismo rural, incluyendo degustaciones de comida regional, exploración de hierbas medicinales y la adquisición de artesanías tradicionales.
Para llegar a Santa Ana desde San Salvador de Jujuy, existen varias opciones de transporte. Una alternativa es tomar un autobús hasta Humahuaca y, desde allí, utilizar los servicios de la empresa de transporte Armagedón, que ofrece frecuencias semanales hacia Santa Ana. Es recomendable contactar directamente a la empresa para obtener información actualizada sobre horarios y tarifas. Otra opción es alquilar un vehículo y recorrer la Ruta Provincial 73, que ofrece vistas panorámicas y atraviesa el Abra del Zenta, un mirador a 4.376 metros sobre el nivel del mar.
En cuanto al alojamiento, Santa Ana cuenta con opciones de hospedaje que permiten a los visitantes disfrutar de la hospitalidad local y sumergirse en la cultura de la región. Se recomienda reservar con anticipación, especialmente durante la temporada alta de verano.