Los aranceles impuestos por el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, comienzan a generar efectos colaterales que van más allá del comercio directo, afectando también a países como Argentina. Analistas económicos advierten que la volatilidad en los mercados continuará durante las próximas semanas, a la espera de definiciones tanto sobre el acuerdo entre el Gobierno de Javier Milei y el Fondo Monetario Internacional (FMI) como sobre el rumbo de la guerra comercial entre Estados Unidos y sus principales socios.
Fernando Marull, socio de la consultora FMyA, consideró que el escenario global seguirá siendo complejo a corto plazo, con nuevos aranceles específicos que entrarán en vigencia esta semana. En el plano local, destacó que, pese al contexto adverso, la Argentina no tuvo una mala performance en la última rueda: el dólar se mantuvo estable y el Banco Central solo debió vender US$30 millones. Sin embargo, advirtió que el impacto puede prolongarse si persiste la incertidumbre internacional.
Desde el sector financiero, Fernando Camusso, director de Rafael Capital, alertó que el “sell off” global continuará y que la economía estadounidense podría encaminarse hacia una recesión. Para Argentina, esto representa un desafío adicional, ya que el riesgo país se disparó a 930 puntos, alejando la posibilidad de volver a los mercados voluntarios de deuda. Además, señaló que el mercado sigue atento a si el acuerdo con el FMI implicará cambios en el esquema cambiario.
Otros economistas, como Adrián Yarde Buller y Fernando Baer, coincidieron en que el entorno internacional complica los planes de estabilización del Gobierno. La caída en el apetito por activos de mercados emergentes y la presión sobre el tipo de cambio real dificultan la implementación del programa económico. Mientras tanto, crece la incertidumbre sobre las intenciones de Trump y el alcance real de las nuevas reglas comerciales que está promoviendo