Por más que el salario en algún momento termine “alcanzando” la inflación, en “el mientras tanto” los trabajadores acumulan una pérdida de ingresos que suele ser despreciada, pero que resulta muy significativa en contextos de inflación alta.
Se cree que si el salario crece hasta igualar el avance de los precios el trabajador no habrá perdido poder adquisitivo. ¡Esto es un error!
Si bien cuando se cumplieron los primeros 22 meses de Gobierno (octubre de 2021), el salario mínimo alcanzó la inflación que se había generado desde el inicio del Gobierno de Alberto Fernández, la pérdida acumulada de ingresos en esos 22 meses representaba 94 mil pesos a valor actual, 2,4 salarios mínimos (al valor del salario mínimo vigente a abril). En los últimos 6 meses (de noviembre de 2021 a abril de 2022) se acumuló una pérdida de 21 mil pesos adicionales a valor actual, más de medio salario mínimo. Así, desde que comenzó el Gobierno hasta abril, los trabajadores acumulan una pérdida de ingresos equivalente a 3 salarios mínimos.
Si continúa la inflación vigente en el primer cuatrimestre de 2022 y se mantiene el calendario de aumentos y adelantos ya definido, los trabajadores sumarían hasta diciembre una pérdida adicional de 1,4 salarios mínimos adicionales.
Durante los últimos 2 años del Gobierno de Macri, el salario mínimo quedó muy rezagado respecto al avance de los precios, a tal punto que los trabajadores acumularon una pérdida de ingresos equivalente a 131 mil pesos a valor actual, equivalente a 3,4 salarios mínimos (de abril de 2022). Con el macrismo los trabajadores acumularon más pérdidas que durante la pandemia.
Por más que el salario alcance la inflación, se pierde ingresos
En épocas de alta inflación, por más que en algún momento del tiempo el crecimiento del salario iguale al de la inflación, el salario real habrá acumulado una pérdida a lo largo del tiempo que transcurrió hasta que el incremento salarial alcanzó el de los precios.
Desde que asumió Alberto Fernández, el salario mínimo aumentó 10 veces en los primeros 27 meses de Gobierno (a abril de 2022), aumentando 131 %, por debajo del aumento del 150 % de la inflación acumulada hasta abril. Implica un retraso salarial del 19 %. En el gráfico 1 se muestran el salario mínimo nominal y el salario mínimo que habríamos tenido ajustando el salario mínimo del inicio del Gobierno Alberto Fernández con la inflación mensual.
A 22 meses del inicio del Gobierno de Alberto Fernández, en octubre de 2021, el salario mínimo nominal y el salario mínimo ajustado por inflación se igualaron. El salario “alcanzó” la inflación sin embargo, en el “mientras tanto” las familias tuvieron pérdidas relevantes porque durante todo el período la inflación superó el aumento escalonado del salario mínimo.
En estos meses las familias acumularon una pérdida de su ingreso que a valor actual equivale a 95 mil pesos, cifra que representa 2,4 salarios mínimos (38.940 pesos en abril 2022).
En el gráfico 1 la pérdida nominal se representa con las barras grises acumuladas (y la pérdida real fue calculada ajustándola por inflación al valor actual de abril de 2022).
Síntesis: hacia octubre de 2021 el salario alcanzó la inflación, pero en esos 22 meses de Gobierno, los trabajadores perdieron ingresos equivalentes a dos salarios y medio.
En los dos primeros años del Gobierno de Macri, el salario mínimo acompañó de cerca la inflación. Sin embargo, durante los últimos 2 años el salario quedó muy rezagado, a tal punto que los trabajadores acumularon una pérdida de ingresos equivalente a 131 mil pesos a valor actual, lo que es igual a casi 3,4 salarios mínimos (de abril de 2022). Para los trabajadores, la pérdida de ingresos durante los últimos 2 años del macrismo fue peor que las pérdidas de ingresos generadas por la pandemia 2020-2021.
Proyecciones
El adelanto del aumento salarial mínimo que se resolvió el 10 de mayo pasado, que genera aumentos en junio y agosto de 3,3 mil y 2,3 mil pesos respectivamente, implica una mejoría, pero no es suficiente para permitir la recuperación del salario al nivel de inicio del Gobierno de Alberto Fernández, y menos para compensar a los trabajadores por los ingresos perdidos.
El adelanto implica que en junio el salario mínimo será un 2 % inferior al salario real.
Para que los aumentos de salarios programados para junio y agosto gracias al nuevo adelanto impidan que los trabajadores sigan acumulando pérdidas, la inflación tendría que ser igual o menor al 2,1 % a partir de mayo.
En cambio, si la inflación mensual entre mayo y diciembre fuese igual a la observada en el primer trimestre (5,7 % mensual promedio), al finalizar el año el salario mínimo a valor actual sería de unos 11,5 mil pesos inferior al vigente, es decir, un 29 % menor.
En este caso, la pérdida acumulada de ingresos entre mayo y diciembre sería equivalente a 49 mil pesos a valor actual, es decir, 1,3 salario mínimo adicional, con lo que los primeros 3 años de gestión terminarían con una pérdida de ingresos equivalente a más de 4 salarios mínimos.
Con este nivel de inflación, el ajuste salarial que en agosto permitiría alcanzar la inflación, tendría que ser del 58 % respecto al salario vigente en marzo, muy superior al 45 % concedido tras el adelanto del pasado 10 de mayo.
Y para compensar las pérdidas acumuladas de ingreso real entre octubre de 2021 y diciembre de 2022, los restantes 7 meses del año los salarios tendrían que ser, en promedio, un 20 % mayores a los salarios ya otorgados con los adelantos del 10 de mayo. Hacia diciembre el salario mínimo tendría que alcanzar alrededor de los 65 mil pesos para que no perdiera poder adquisitivo frente a la inflación.