A partir de noviembre, los usuarios de Tarjetas de Crédito enfrentarán un desafiante aumento en las tasas de interés, con un interés nominal anual del 122%. Este cambio se implementó mediante la Comunicación «A» 7862/2023 del Banco Central (BCRA), publicada en el Boletín Oficial en los primeros días de octubre.
El impacto de esta medida será especialmente notorio en las financiaciones de importes menores a $200.000, donde el costo financiero total (CFT) podría alcanzar un sorprendente 302.8% del valor original del producto, dependiendo de las condiciones de financiamiento ofrecidas por cada banco.
Es importante destacar que para consumos que superen los $200.000 o $200 en moneda extranjera, se aplicará una regulación por la Ley de Tarjetas de Crédito (25.065), que establece que los intereses no pueden exceder el 25% de la tasa aplicada a préstamos personales por entidades financieras.
Por lo tanto, el costo financiero total variará según el banco emisor y el tipo de compra realizada. Los usuarios deben ser conscientes de estos cambios y considerar cuidadosamente su capacidad de pago al utilizar tarjetas de crédito en transacciones a largo plazo. Además, es esencial conocer los detalles de su tarjeta, incluyendo los costos asociados, límites de compra y financiación, y las tasas de interés compensatoria y punitoria.
El Banco Central brinda una serie de recomendaciones para los usuarios a la hora de elegir y utilizar tarjetas de crédito, como conocer las tasas de interés, costos asociados, límites y promociones. También enfatiza la importancia de mantener segura la clave de identificación personal y no pagar solo el saldo mínimo, ya que acumular saldo puede resultar en intereses significativamente más altos en el futuro.
