El uruguayo Pablo Laurta, acusado del doble femicidio de Luna Giardina y Mariel Zamudio en Córdoba y del asesinato del remisero Martín Sebastián Palacio, rompió el silencio este miércoles al ser trasladado desde Gualeguaychú a Concordia, donde será indagado por la muerte del chofer.
“Todo fue por justicia”, dijo Laurta a los periodistas antes de subir al vehículo que lo llevó a la fiscalía. La frase, pronunciada sin muestras de arrepentimiento, generó indignación entre los presentes. Minutos después, ya en la sede judicial, lanzó otra declaración perturbadora: “Tienen que venerarlo, es un mártir”, en aparente referencia al remisero desaparecido.
El traslado de Laurta fue dispuesto por la fiscal Daniela Montangie, a cargo de la causa por el homicidio de Martín Palacio, cuyo cuerpo —presuntamente mutilado— fue hallado dentro de una bolsa en una zona rural de Concordia. Según la fiscal, las pruebas lo ubican como el último pasajero del vehículo del remisero, cuyo teléfono dejó de emitir señal en la misma área.
“Hay altas probabilidades de que sea el cuerpo de Martín Palacio”, aseguró Montangie. El auto del chofer había sido encontrado incendiado en Córdoba, en un hecho que afectó a otros 14 vehículos y obligó a evacuar a más de 130 personas. Tras su declaración en Entre Ríos, Laurta será trasladado a la cárcel de Bouwer, donde enfrentará el proceso judicial por los femicidios.
Actualmente, la Justicia de Córdoba acusa a Laurta por doble femicidio agravado y sustracción de menores, mientras que la Justicia de Entre Ríos investiga su implicación en el homicidio de Palacio.
El niño, que cumplió 6 años este martes, permanece bajo resguardo. Las pericias de ADN y los informes forenses continuarán en los próximos días para confirmar si el cuerpo hallado pertenece al remisero desaparecido.

