El 21 de febrero se celebra el Día Internacional de la Lengua Materna, una fecha proclamada por la UNESCO en 1999 para promover la diversidad lingüística y cultural en todo el mundo. Esta conmemoración tiene sus raíces en los trágicos eventos de 1952 en Daca, Bangladés, donde varios estudiantes fueron asesinados mientras defendían el reconocimiento del idioma bengalí como lengua oficial. Desde el año 2000, esta jornada busca resaltar la importancia de las lenguas maternas en la educación y la preservación del patrimonio cultural.
En vísperas de esta celebración, un grupo de 70 artistas y creadores asturianos ha firmado un manifiesto solicitando la oficialidad de la Llingua asturiana mediante la reforma del estatuto de autonomía. Consideran esta acción esencial para proteger su patrimonio cultural y garantizar el derecho a expresarse en su lengua materna. El manifiesto será presentado a los grupos políticos regionales con el objetivo de alcanzar un consenso que ponga fin a la discriminación percibida y normalice el uso del asturiano en Asturias.
Mientras tanto, en la Comunitat Valenciana, la Generalitat ha iniciado una consulta para que las familias elijan la lengua base de instrucción en los centros educativos, generando tensiones entre familiares y educadores. La medida ha provocado divisiones en las comunidades educativas y ha suscitado debates sobre el futuro del valenciano en el sistema educativo. Expertos señalan que esta iniciativa, programada del 25 de febrero al 4 de marzo, podría tener implicaciones pedagógicas significativas y contribuir a una creciente polarización en el ámbito educativo.
