Diego Schwartzman festejó por partida doble en el ATP 500 de Barcelona, en una jornada tan maratónica como exitosa. A primera hora venció el italiano Lorenzo Musetti por 2-6, 6-4 y 6-3. De inmediato, apenas tuvo un respiro para ir al vestuario y preparar el cuerpo para lo que venía. Y lo que venía era buscar el pase a las semifinales. Enfrente tuvo al canadiense Félix Auger-Aliassime (9° del mundo), al que superó por 3-6, 6-2 y 6-3, con lo que ya está entre los cuatro mejores del ATP 500 de Barcelona.
Este sábado, a las 8.30 de nuestro país, el Peque se medirá con el español Pablo Carreño Busta, que venció al noruego Casper Ruud por 4-6, 7-6 (8) y 6-3).
En total, para eliminar a sus dos rivales, Peque jugó cuatro horas y quince minutos. La victoria sobre Musetti le demandó 2 horas y 3 minutos, mientras que el éxito ante el canadiense implicó un esfuerzo de 2 horas y 12 minutos. Tuvo que disputar dos encuentros debido a que el jueves, el porteño nunca pudo arrancar el encuentro ante el italiano debido a las persistentes lluvias en Barcelona.
El presente de Schwartzman es muy prometedor: al triunfar ante Auger Aliassime, consiguió el triunfo N°12 ante un Top-10. Además, sigue N°15 en el ranking, pero N° 9 en la Race a Turín, donde llegarán los mejores para disputar el Masters.
Este 2022 es un camino sinuoso para el tenis del Peque, que no tuvo un buen paso por los Masters 1000 de Indian Wells y Miami, con derrotas en segunda y en primera ronda respectivamente. Sin embargo, deberá continuar con ritmo y lo está demostrando en la gira de polvo de ladrillo. Tiene que defender puntos en el Masters 1000 de Roma y en la cita del año en esta superficie: Roland Garros.
La victoria del Peque ante Musetti para llegar a los cuartos de final
Diego Schwartzman sabía bien que no iba a tener un partido sencillo. Enfrente tenía a un rival conocido, el italiano Lorenzo Musetti (68° del mundo) y una de las mayores promesas que tiene el circuito de la ATP. Hace unos días se habían enfrentado en el Masters 1000 de Montecarlo; ahí la victoria fue para el argentino por 2-6, 6-4 y 6-3. Ahora el escenario se modificó y se volvieron a medir en los octavos de final de Conde de Godó, el ATP 500 de Barcelona.
Peque (15° del mundo) impuso condiciones en un partido que se le volvió complicado por momentos y mostró carácter para sobreponerse por 6-4 y 7-5 en dos horas de juego. Más allá del resultado, el 15° del mundo supo mostrar carácter y convicción a las distintas adversidades que el juego y el rival le presentaron. Sobrevivió, tenísticamente hablando, porque el joven italiano le mostró muy buen repertorio técnico y le quebró el saque en varias ocasiones.
En un momento se pensó que iba a ser un partido de rápida resolución para el Peque, porque el primer set terminó a favor del argentino, que se impuso por 6-4 en un parcial que fue quiebre por quiebre, con 4 para Schwartzman y 3 para Musetti. Sin embargo, todo se volvió cuesta arriba.
Durante todo el partido hubo cambio de protagonismo. Nadie daba garantías de sentirse ganador. En el segundo set, parecía todo encaminado para Musetti, el joven de 20 años que demostró que tiene mucho futuro en el circuito. El italiano iba 3-1, pero Schwartzman ganó tres juegos seguidos. Pero en esta etapa, está camino a buscar su mejor versión todavía y tiene momentos de incertidumbre. Musetti no se lo perdonó y se lo dio vuelta por 5-4. Pero el final le tenía preparado una muestra de fortaleza al argentino, que terminó venciendo por 7-5 el segundo set y sentenció la victoria.
El argentino venía de derrotar al estadounidense Mackenzie McDonald por 6-2 y 6-2. Finalista esta temporada en los ATP de Buenos Aires y Río de Janeiro, ahora va por más.
Schwartzman y Carreño se clasificaron en una maratoniana jornada, en el que los dos se vieron obligados a jugar en el mismo día su partido de octavos y de cuartos, después que la lluvia prácticamente obligara a suspender la jornada del jueves. Peque tuvo una tarea formidable en la parte final del espectáculo: otra vez, con los dientes apretados, sacó el partido adelante.
Rafael Nadal, con 12 títulos, es el máximo ganador del ATP de Barcelona, pero ahora está ausente por una lesión en las costillas. El máximo favorito era el griego Stefanos Tsitsipas, campeón en el Masters 1000 de Montecarlo: perdió con el joven Carlos Alcaraz, a quien los más atrevidos comparan con el mallorquín, por 6-4, 5-7 y 6-2.