La acumulación de minerales y gérmenes en el suministro de agua puede provocar manchas amarillas o marrones en el inodoro, conocidas como sarro. Este problema, además de ser antiestético, puede generar malos olores en el baño. Afortunadamente, existen soluciones sencillas y económicas para eliminar estas manchas.
- Vinagre y limón: La combinación de estos dos antisépticos naturales es ideal para limpiar el inodoro. Mezcla media taza de vinagre con jugo de limón, humedece una esponja con la mezcla y frota las zonas afectadas. La acidez descompone el sarro de manera efectiva.
- Bicarbonato de sodio y agua oxigenada: Esta opción es perfecta para quienes prefieren un método alternativo. Mezcla 125 ml de agua oxigenada con cuatro cucharitas de bicarbonato de sodio. Aplica la pasta sobre las áreas manchadas, deja actuar durante 20 minutos y enjuaga.
- Refresco de cola: Aunque suene inusual, el refresco de cola también ayuda a descomponer el sarro. Vierte 350 ml sobre las manchas, deja reposar de 30 a 50 minutos y frota con una esponja. Para un mejor resultado, puedes combinarlo con bicarbonato y limón.
- Amoníaco: Si el sarro es muy resistente, una solución con amoníaco puede ser útil. Diluye una pequeña cantidad en un balde con agua, frota las zonas afectadas con una esponja y verás cómo desaparecen las manchas. No olvides usar guantes y mascarilla para evitar el contacto con los vapores.
- Piedra pómez: Este método, comúnmente usado para retirar piel muerta, también es eficaz para eliminar el sarro. Humedece la piedra en agua caliente y frota el inodoro para deshacerte de las manchas más rebeldes.
Con estos sencillos métodos, podrás mantener tu inodoro limpio y libre de sarro.
