El enfrentamiento entre Viviana Canosa y Lizy Tagliani escaló en los últimos días a raíz de una serie de acusaciones públicas realizadas por la periodista. Canosa sostuvo que años atrás rompió el vínculo con Lizy tras encontrarla robándole dinero de su cartera y llevándose comida de su casa. Las declaraciones generaron revuelo, pero la situación tomó un giro aún más delicado cuando deslizó que la humorista habría tenido un vínculo con menores, involucrando incluso al abogado Fernando Burlando, quien, según dijo, habría decidido no representarla al conocer esta supuesta situación.
La polémica creció cuando el martes por la mañana, Canosa se presentó en Comodoro Py para realizar una denuncia presuntamente vinculada con casos de trata. Si bien no mencionó directamente a Tagliani, sus dichos en distintos medios dejaron entrever una posible relación. Sin embargo, horas más tarde, en una entrevista con TN Central, se desdijo parcialmente y aclaró que había llegado a hablar del caso de Loan Peña, desligándolo por completo de la figura de Lizy. Su abogado, Juan Manuel Dragani, aseguró que nunca se utilizó el término “abuso” y que no se le adjudicó a Tagliani un delito de esa gravedad.
Esta marcha atrás generó una fuerte reacción en redes sociales, donde muchos usuarios señalaron a Canosa por dañar la imagen de Lizy sin pruebas concretas, mientras que otros pidieron que la Justicia actúe ante lo que consideran una difamación pública. Por su parte, la conductora de “La Peña de Morfi” optó por no hacer declaraciones y se limitó a compartir mensajes de apoyo en sus redes sociales.
El momento personal que atraviesa Lizy, en pleno proceso de adopción con la guarda provisoria de un menor, incrementó la sensibilidad del caso. La posibilidad de que su situación familiar se vea afectada por estas acusaciones sin sustento ha generado indignación. Ahora, será la Justicia quien deberá esclarecer los hechos y determinar si hubo calumnias o algún tipo de delito que perseguir.