Una mujer fue detenida en las últimas horas acusada de matar a su hija de ocho meses en la localidad bonaerense de Villa Domínico, partido de Avellaneda.
Según informó una fuente cercana a la investigación a Crónica, la acusada habría ahorcado y golpeado a la beba con un ladrillo en la cabeza hasta provocarle la muerte.
Tras el ataque, la mujer incendió la vivienda ubicada en un pasillo de la calle Campichuelo al 4270, a solo dos cuadras de un comedor comunitario, en un presunto intento de borrar pruebas y escapar.
Las llamas se propagaron con rapidez y afectaron a casas linderas, lo que generó pánico entre los vecinos de Villa Corina. Bomberos lograron controlar el fuego antes de que se extendiera a todo el barrio.
En medio del operativo, la policía desplegó un cerrojo en la zona y detuvo a la mujer mientras intentaba huir. Ahora se encuentra a disposición de la fiscalía de turno.
Los investigadores no descartan que el incendio haya sido intencional para destruir evidencias.
Por estas horas, la Justicia busca determinar si la imputada comprende la gravedad de sus actos y cuál fue el motivo detrás del filicidio.
Hasta el momento, no trascendieron datos sobre el padre de la víctima ni sobre el entorno familiar.
Expertos señalan que estos crímenes, aunque infrecuentes, son de los más difíciles de comprender y prevenir.
El médico psiquiatra Emilio Hidalgo (M.P. 3082) explicó a TN que pueden deberse a trastornos mentales graves, como una psicosis con ideas delirantes, en la que la persona cree erróneamente que el hijo representa una amenaza. También mencionó trastornos de personalidad o episodios de trastorno explosivo intermitente, que generan reacciones desmedidas y violencia hacia los más cercanos.
Desde la criminología, se reconoce que las causas de un filicidio pueden variar y que la salud mental es un factor común en muchos de estos casos, lo que plantea desafíos tanto para la prevención como para el abordaje judicial.
