El agua de limón con chía, además de ser refrescante, es conocida por sus efectos positivos en la salud debido a los nutrientes que contienen sus dos ingredientes principales. Entre sus beneficios más destacados se encuentra su capacidad para ayudar a controlar el peso, ya que la chía brinda una sensación de saciedad, evitando que comamos en exceso. Además, mejora la digestión gracias a su alto contenido de fibra.
Otro de los beneficios de esta bebida es que puede prevenir el envejecimiento prematuro. Tanto la chía como el limón contienen antioxidantes, que combaten los radicales libres responsables de la oxidación de las células, retrasando así los signos del envejecimiento. También fortalece el sistema inmunológico gracias al alto contenido de vitamina C del limón.
El agua de limón con chía ayuda a desintoxicar el organismo. Las propiedades depurativas del limón y la chía facilitan la eliminación de toxinas a través de la orina y regulan la flora intestinal.
Aunque esta bebida es beneficiosa a cualquier hora del día, varios artículos nutricionales sugieren que es más eficaz consumirla en la mañana en ayunas. Esto se debe a que, durante la noche, el cuerpo se desintoxica de manera natural y al despertar, el agua de limón con chía ayuda a eliminar las toxinas restantes con mayor facilidad. Además, su alto contenido en fibra activa el metabolismo, similar a los efectos del ejercicio o del agua simple, lo que ayuda a regular las calorías y su uso en el cuerpo. Las propiedades hidrosolubles de la chía también permiten una mejor absorción de nutrientes cuando se consume por la mañana.
Sin embargo, es importante no excederse en su consumo, especialmente para personas con problemas gástricos como la gastritis, ya que podría aumentar la acidez estomacal. Por eso, se recomienda consultar a un nutricionista o especialista médico antes de incluir el agua de limón con chía en la dieta diaria para asegurarse de que no cause efectos negativos en la salud.